CLIVE BARKER – LIBROS DE SANGRE
Reseña
Cuando, como lector avezado en el horror, creí haber alcanzado la cúspide de una basílica del espanto, descifrado el hermético idioma de las catedrales de la crueldad, asimilado toda la gama artística de una Capilla Sixtina del dolor y la agonía.
Después de haber alzado la cuchilla resplandeciente
en el suspenso de Robert Bloch, de permanecer
aterrado y retorcido entre los dioses arquetípicos del maestro
Lovecraft, tan atrapado en las crónicas negras de Brian Lumley o sometido a la
desesperanza poética del gran Poe.
Desde una icónica Liverpool surge él;
filósofo de la carne destazada, acueducto formal de un flujo de sangre caliente
derramada, alquimista de la truculencia, supremo artífice del suplicio por los
ganchos y las cadenas. El monstruo que
enajena con letras.
Por suerte lo descubrí, una tarde
sediento de misterio y muerte él llegó a mí, con su primer Libro de Sangre.
Caminando por una turística ciudad en verano, odiando el sol y el sudor con
bronceador de la gente.
Buscaba un refugio frio, un gatillo sensible
que volara mi mente y la esparciera en esquirlas, bien lejos de aquella avenida que
freía mis pies, a pesar de las sandalias y mi paso rápido.
Al pasar por una angosta librería, mi
alma, que se rezagaba del cuerpo anticipando algo, quedó prendada de aquella
portada, de ese libro que lucía como un talismán del infierno.
Así te descubrí, por el capricho del
inmisericorde destino. Como una brujería de verano o un canto de sirenas
desquiciadas.
Clive Barker, eres mi maestro, solo
tú puedes volver maquiavélica a una chancha, en un “Blues de la sangre del
cerdo”. Pasar cada semáforo en rojo de la imprevisibilidad, en “Los muertos
tienen autopistas”. O proclamar ¡Abajo Satán!, en un infierno dantesco erigido
para la vanidad aciaga del hombre.
No hay más faro que el trascendental
horror nacido de tu pluma, maestro Clive Barker. Tus muertes son apoteósicas,
tus desmembramientos, un encanto delicioso. Los buitres sobrevuelan tu lujuria,
la muerta danza para ti.
“En las colinas, las ciudades”, el
amasijo de cuerpos, los tendones abigarrados, y esos mil ojos expectantes, de una
masa amorfa echada a andar por los campos; hacen que el ingenio narrativo se torne
inalcanzable.
El Libro de sangre es un portal a
otro universo, donde Los Cenobitas corrompen el alma, degustan la carne y
profanan el cuerpo. Después de Barker, ya no se podrá volver a la segura comodidad del sueño. Créelo… no
estoy exagerando. Son varios volúmenes, pero no te diré más. Una forma de
horror, jamás concebida, espera.
De
seguro, si Stephen King reencarnase en perro, Clive Barker sería su sádico
dueño.

